La frecuencia de redacción ha bajado al cero casi absoluto, tanto gracias a la crisis, como a la doble paternidad. Las dos causas han descubierto el poco arte que tenía yo hasta la fecha en saber sacarle partido al tiempo.
Este tiempo, en los últimos 3-4 años, lo estoy dedicando a mejorar mi gestión del tiempo, que más bien es mi saber elegir qué hacer en cada momento. Todo un arte que requiere de continua actualización, porque está íntimamente vinculado al cambio que sufre la vida misma. La vida es cambio.
Poco a poco voy consiguiendo tener algo de dominio en este arte del dominio del tiempo.
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Espero que no tarde mucho más en escribir la próxima nota.
Consulta a los lectores: ¿estáis ahí? (podéis responder en el espacio de comentarios :-))
Nota final: no he dejado el go, aunque sólo juego contra mi tablet en un 13x13 y pierdo casi la mitad de las veces.