17 de septiembre de 2008

Gogedanken... START!



Por fin me decido y comienzo con mi segundo blog.

El primero fue dedicado a mis devaneos filosóficos, pero hace tiempo que no tengo mucho tiempo para ellos, y finalmente no pasé de un par de entradas en el blog. Y como un principio frustrante es difícil de superar, hasta que no entré en contacto con bloggers, no me ha vuelto a entrar el gusanillo.

Como he dicho, últimamente todas mis inquietudes filosóficas son pocas, básicamente porque mi tiempo es escaso, y mis lecturas no pueden ser muy profundas. Pero hace cosa de casi hace un año entré en contacto con algo que me está ayudando mucho a ser mejor persona (que de eso se trata con la filosofía...).

Lo que descubrí es un juego de mesa. Si, si, lees bien, un juego de mesa. Se trata del go, un milenario juego nacido en China allá aproximadamente 3.000-4.000 años. En Wikipedia se puede encontrar un buen resumen.

Y ahora os preguntaréis (igual); ¿cómo?

Seré breve: resulta que allá por finales de 2006 me encontré y me enamoré de una bella mujer japonesa. En Junio de 2007 ella se animó a venir a Bilbao a vivir y en Mayo de 2008 nos casamos.

Mi introducción al juego fue algo lenta, paso a paso.
  1. Aproximadamente en Septiembre-Octubre de 2007 descubrí el juego a través del manga japonés "Hikaru no go". Estuve estudiando algo el juego desde el PC y busque contactos en Bilbao al respecto, sin mucha suerte (encontré GoZoro, pero parecía que hacía tiempo que habían perdido actividad, así que desistí de contactar directamente).

  2. En mi primer viaje a Japón con mi ya prometida en Diciembre tuve la suerte de jugar unas cuantas veces con mi actual suegro en el tablero del 9x9. Tuve un par de momentos muy buenos y me quedé con el buen gusto de boca.

  3. Pasaron unos meses y esta vez descubrí que en las jornadas manga organizadas en Barakaldo por la asociación Motsukora a finales de Marzo había un pequeño taller de go organizado por la asociación de go de Euskadi. Conocí a su presidenta y tuve un grato reencuentro con el goban (tablero de go).

  4. Finalmente (por fin!), un libro se puso en mi camino y esta vez si que terminé por hacerme un "otaku" (especie de frikie en japonés) del go. En casa de mis padres encontré un libro firmado por un bilbaino a finales del 98, "El go, un juego oriental milenario" (Miguel Ángel Antolínez, editado por "Nueva Acrópolis").
    Es un gran libro, sin duda. Las reglas del juego aparecen al final y el libro se centra en toda su historia, mitología, filosofía, los fuertes vínculos con la pedagogía, la estrategia militarm la economía, su comparación con el ajedrez (de la que hablaré más adelante), etc.

  5. Más tarde, a mediados de Junio de este año quise enterarme de cómo aprovechar mi segundo viaje a Japón para poder disfrutar del go en el páis donde se desarrolló su juego a la forma actual y donde juegan 10 millones de personas. Contacté con la Asociación Española de Go y me atendieron fenomenal a mis preguntas de cómo localizar un club de go.
    Básicamente me dijeron que en un club de go la gente va con el juego aprendido y que un jugador normal no dedica su tiempo a enseñar a un aprendiz (una dicho del go es que hasta perder 100 partidas no se es jugador de go; todavía debe ser mi caso...).

    Pero resulta que en su respuesta me pusieron de copia con el maestro del club de go de Bilbao. Y 15 minutos después de recibir el mail... me llamó Miguel Ángel Antolínez, el sensei de la escuela de go de Bilbao (¡y el autor del libro arriba mencionado!).
    ¡Oiba! (expresión bilbaina donde las haya)
    ¡¡Pero si no encontré ningún club en Bilbao hasta ahora!!
    Miguel Ángel me aclaró cuándo y cómo se citan en la escuela (ver arriba web).

  6. Finalmente, durante julio fui a todas las reuniones del club de Bilbao antes de ir a Japón.
Bueno, creo que para empezar es suficiente... En mi próxima entrada seguiré con mi historia de introducción al go (mis compañeros del club, mis experiencias en Japón,...).

¡Hasta pronto!

P.D.: "Gedanken" es en alemán "pensamientos, reflexiones".

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